El coraje me da la determinación necesaria, el barro de los surcos el cansancio de la tarde, y tus palabras quedaron en el aire, quiero hablarte, pero ya nunca seré yo, tus labios me dan un beso que recordare para siempre, chispas bailando en el aire, nuestro calor suelto en el aire, pierdo mi ritmo, se chocan con mi cuerpo y pierdo mi ritmo, letras caducando a cada segundo, las junto, te las muestro, este es mi arte, una reacción genuina que parte de algo artificial, y fui duro y mordí cada dificultad con todos mis dientes, mordí tan fuerte que pude llegar más allá, deje las ilusiones en los roperos y me vestí con verdades, miles de pieles, miles de corazones, miles de raíces.
Crearon todo para nosotros, comimos hasta llenarnos, y todo fue igual.
¿Dónde estas?
Quedaron mis, huesos al aire, nuestras miradas en solo un instante, sobre la herida, sobre la sangre, sobre el suelo, mi grito trancado, y la inocencia de aprenderlo todo. ¿Dónde estabas vos?
Integro todo en esta prosa, yo estaba en las gradas, mirándote, admirando lo que haces, estabas vestida de verdades y pasiones, eso es suficiente para mi.