Recordaron mi aliento, cuando me vieron morder la bandera de la tregua. Somos números y somos también lo que falta para ser una sentencia, somos, puras palabras, y mira que algunas de ellas abogaron por mi, me recordaban, fui tosco, pensé que era bueno, mordi la cuerda con todo mi ser... desde este peldaño rescato el orgullo que estuvo de más, sobro al principio, luego falto, lo se, lo recorde cuando me vi ahogado y sin salidas, más enojado que perdido, y fueron esas noches al limite, donde el cofre del tesoro, se regodeaba, dibujaba llaves para vos, esperando por vos, se opacaba, mi quijada atoró, indignada.
Ya lo dije, solo quedan letras, y en tus letras me pude ver, en tus gritos fui la calma, en tus letras, ahi estoy, y, en la vorágine supe ser tambien, ese techo de chapas, ese, el perpetuo.
Ya esta, lo dijeron, puros relampagos, fui el voltaje que te calentaba, caries, puntos sin finales, se terminaran todas nuestras madrugadas, arde nuestra piel, lo se bien.
Arden más mis entrañas que tu corazón.
Al final, queria un momento que sea solo de nosotros, quede pintado, me imaginaba frente a vos, esta es nuestra esquina. Silencio.
Ya lo dije, solo quedan letras.
Cara a cara, vos y yo.
Eso es todo.
Solo pudiste rezar por mi, me vi de rodillas, suplicando por un solo silencio, no buscaba nada, en la oscuridad las piezas respondieron, afiladas, cansadas de sobrevivir, de ser clemencias.. estaba de rodillas...
Recorde al leerlas, el peso que arrastraron, todo se vuelve un "hasta acá llegamos", ya solo esperan despedirse. Veranos eternos, notas perdidas, no importa más, no podes ver lo elegible, ahora solo queda algo que ya ni te sirve, pasos ligeros, la sombra de un baile indigerible.
Recordé al leer entre lineas, la infinidad, la conquista.