Cada día fue una cosa aparte, cada día fui yo siendo mi peor versión y eso era lo único que quería, todo se siente bien, es el final, la ultima bancada, una ultima bocanada, el aliento de los del fondo, todas esas palabras vuelven y acarrean un peso enorme, casi merecido, escribo solo por esos momentos, donde no te lo puedo decir ni ahora ni en diez minutos, nada, nada, la conexión se perdió. Solo hay letras de nostalgia, versos sobre el verdadero amor.
Si no existen energías ¿Queres cruzarte con la mía?
No existen respuestas que marquen un punto final, yo las pinte con sangre, un punto y coma, esas si, esas valen. Todavía sigo tratando de borrar las manchas en el papel.
Es todo un teatro, y a esas palabras, ya no las necesitamos.
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